Contribuyan a la consolidación de la infraestructura verde a través de la mejora del conocimiento, el estado de conservación y la restauración de los hábitats y especies marinas, así como el desarrollo de una red de espacios marinos protegidos coherente, conectada y gestionada de manera eficaz.
Para ello se prevé el apoyo a: la elaboración de estudios necesarios para mejorar el conocimiento de las especies marinas, completar los objetivos de designación de espacios protegidos y facilitar la elaboración, implementación y seguimiento de sus correspondientes planes de gestión, así como reducir las amenazas, presiones e impactos que les afectan; el desarrollo de proyectos de conservación y restauración de los hábitats y especies marinas y de los espacios marinos protegidos, incluyendo los aspectos relativos a la planificación y gestión, así como experiencias demostrativas y actuaciones encaminadas a fortalecer, mejorar y prevenir la pérdida de la conectividad en el ámbito marino.