El proyecto se basa en la automatización y digitalización de los banbury (mezclador interno), empleados en el desarrollo de predispersados para caucho en el sector del calzado. Este proceso incluye la mejora de sistemas auxiliares como la refrigeración de agua, o la gestión final del producto, lo que permitirá alcanzar un mayor rendimiento productivo con una reducción significativa de los residuos generados y de los costes indirectos. El control efectivo de los recursos medioambientales utilizados, la reducción de mermas y pérdidas, junto con la modernización tecnológica, es esencial para mantener la rentabilidad y competitividad en un mercado cada vez más exigente. Una de las formas más efectivas para llevar un control de todos estos procesos es optimizando los procesos de producción y logística. Para ello, se va a llevar a cabo la implementación de un nuevo sistema SCADA de automatización y digitalización, que permita gestionar de manera más precisa los procesos de producción, optimizar recursos y reducir tiempos de inactividad. Además, se va a implementar un nuevo equipo frigorífico refrigerante que controlará térmicamente todas las líneas de predispersado de una manera más eficiente. Esta nueva instalación supone una mejora sostenible respecto a las torres refrigerantes anteriores, ya que reduce el consumo agua utilizada, elimina su posterior vertido a la depuradora, suprime su tratamiento con sustancias químicas como biocidas o cloro/bromo, y evita también los riesgos de legionela. En definitiva, la instalación de ambos equipos impactará en una clara mejora productiva de nuestros procesos de una manera más ecosostenible.
El objetivo principal es la digitalización de los mezcladores internos empleados para el desarrollo de predispersados (aditivos que se utilizan en las suelas de caucho del calzado), mediante la inclusión de un software específico que permita controlar todas las etapas del proceso. Esto permitirá reducir la necesidad de reprocesamiento de las mezclas, así como las pérdidas y mermas generadas en los procesos, disminuyendo así los residuos producidos. Se favorecerá el desarrollo de materiales optimizados, con un control de la maquinaria más eficiente, a tiempo real y herramientas más modernas que permitan la monitorización del proceso. Además, se introducirá un nuevo sistema de refrigeración de agua para los mezcladores contribuyendo a reducir la cantidad de agua y el impacto ambiental. Estas mejoras también impulsarán el desarrollo de materiales optimizados para satisfacer las demandas del mercado. Además, se implementará una mejora en la cuantificación de las emisiones en toda la cadena de valor del proceso. Con este proyecto la entidad plantean dos resultados: 1. mejorar su huella ambiental, en términos de reducción del coste energético y de mano de obra directa en todas las líneas de predispersado (pretenden reducir el 95 % de horas de reprocesado, con la consiguiente reducción del gasto, que no cuantifican), reducción de tiempos de inactividad y aumento de la productividad de las líneas de predispersado (no se cuantifica en cuánto se reducirán), y la disminución de residuos de productos químicos orgánicos a la mitad que en años anteriores (de unos 63.305 kg en 2023 a 31.652,5 kg después del proyecto); y 2. Reducción de residuos de proceso generados de un 95 %. Los indicadores planteados serán la reducción del consumo de agua, supresión de biocidas y otros productos químicos para el tratamiento del agua (no cuantifican) y disminución en el consumo de energía, de 3.000 V a 400 V.
Optimización del rendimiento productivo a través de la digitalización y automatización de los procesos, con una significativa reducción de los residuos derivados y de los recursos utilizados
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