En España hay 6.827 municipios con menos de 5.000 habitantes, que concentran a 5,7 millones de personas, el 12 % del total. De ellos, en la última década, han perdido población 5677 municipios. El potencial dinamizador de la biodiversidad y el patrimonio natural resultan de vital importancia, ya que en los municipios que forman parte de espacios naturales protegidos, el porcentaje de municipios que pierden población (30%) es inferior al de la media en el ámbito rural (83,3%). Uno de los grandes objetivos del reto demográfico es la fijación de población en los territorios de áreas rurales despobladas o con riesgo de despoblación, pero un turismo sin planificar puede derivar en usos que puedan generar daños ambientales, así como afectar a la calidad de la vida de las personas que viven allí, generando un efecto contrario al que se persigue. Además, una alta frecuentación o, incluso, la masificación de las masas forestales puede tener efectos adversos para la biodiversidad, comprometiendo el estado de conservación del hábitat y especies, resultando también en la minoración de sus valores paisajísticos. Por ello, este proyecto tendrá en cuenta la compatibilización del uso público con la conservación de la naturaleza.
Este proyecto hará frente al reto demográfico a través del turismo forestal sostenible, generando las herramientas para diseñar una metodología de análisis y gestión del uso público que tenga en cuenta la compatibilización del uso público con la conservación de la naturaleza, además de la adaptación al cambio climático y prevención de incendios. Con esta metodología se crearán instrumentos de planificación y se realizará una unificación de gestión con replicabilidad en otras comunidades autónomas. Además, el presente proyecto tendrá un importante componente de transformación paisajística, invirtiendo en mejorar su estado de conservación, generar paisajes resilientes al uso público y al cambio climático, todo ello a través de los resultados científicos de la evaluación ambiental. Asimismo, FLOW4BIO pretende impulsar la bioeconomía de las zonas rurales a través del diseño de estrategias, creación de un perfil laboral y empleo verde, formación, transferencia del conocimiento, participación ciudadana, y comunicación.
Impulsar un modelo de turismo forestal sostenible que dé respuesta al reto demográfico, posicionando las áreas rurales como destinos turísticos sostenibles, fomentando su desarrollo económico y social de forma compatible con la conservación de la biodiversidad a través de metodologías e instrumentos de planificación, gestión forestal para la recuperación de hábitats, adaptación al cambio climático y mejora de la biodiversidad, y formación y generación de empleo verde.
Flow4Bio – Bosques fluidos de biodiversidad y personas