El turismo es uno de los ámbitos más afectados por el cambio climático, que incide sobre cuatro aspectos clave: los recursos, las infraestructuras, la oferta y la demanda, afectando con especial intensidad a los destinos de litoral y de nieve.
Puesto que es también uno de los sectores que más riqueza aporta a la economía española, es esencial que las empresas del sector puedan anticiparse a los efectos del cambio climático de forma proactiva.
A pesar de que ha avanzado de forma muy significativa en la implementación de medidas de mitigación, cálculo de la huella de carbono, etc., el sector empresarial debe asumir todavía la planificación relativa a la adaptación. Para ello, hace falta avanzar en la elaboración de metodologías concretas que permitan hacer el diagnóstico de su nivel de vulnerabilidad y seleccionar esas acciones de adaptación que mejor se adapten a su contexto particular.
El objetivo general del proyecto es crear las herramientas y fomentar las capacidades necesarias para que las empresas turísticas se autodiagnostiquen en adaptación al cambio climático para las distintas modalidades de turismo (costa, alta montaña, insular, interior), así como en función de cada actor turístico (alojamientos, tour operadores, turismo activo, etc.), y así hacer un salto significativo en la integración de la adaptación en las estrategias de las empresas turísticas en España.
Entre sus metas específicas se encuentran:
Adaptación de empresas turísticas al cambio climático (Turismo + Resiliente)