Las áreas naturales protegidas favorecen el crecimiento económico de América Latina. Por eso, desde Tarija, al sur de Bolivia, trabaja la Fundación Nativa, con apoyo de la Fundación Biodiversidad, para la creación de la Reserva de Biosfera Trinacional del Gran Chaco Sudamericano.
Las áreas naturales protegidas favorecen el crecimiento económico de América Latina. Por eso, desde Tarija, al sur de Bolivia, trabaja la Fundación Nativa, con apoyo de la Fundación Biodiversidad, para la creación de la Reserva de Biosfera Trinacional del Gran Chaco Sudamericano.
Se trata de una ecozona que abarca buena parte del norte argentino, el este de Bolivia, Paraguay y un rincón de Brasil. En alianza con la entidad argentina Pro-Yungas y la paraguaya Moisés Bertoni, se busca mejorar la gestión de ese territorio.
El Gran Chaco es una llanura boscosa cuya formación, hace millones de años, está vinculada a los orígenes de la Cordillera de los Andes. Los ríos depositaron sedimentos en esa suerte de fosa que ha conformado, durante siglos, el espacio vital de numerosas etnias indígenas, algunas de las cuales han llegado con sus tradiciones a nuestros días.