El proyecto COMPÁS de bioeconomía prevé establecer el marco científico-técnico, normativo y social necesario en nuestro país para la utilización del herbivorismo pírico en la gestión forestal preventiva frente a grandes incendios, incidiendo en la importancia de gestionar el territorio natural para conservarlo y en el papel que deben desarrollar en esta necesaria conservación las nuevas generaciones ligadas al medio rural.
En el actual escenario de cambio global, la gestión del paisaje es una prioridad. Los mega incendios de los últimos años, ocurridos tanto en Europa (Portugal, Grecia, Andalucía…) como en otras partes del planeta (Chile, California, Australia…), han puesto en la palestra nuevos escenarios de riesgo con los que tendremos que convivir y a los que deberemos hacer frente de un modo global, integrado e inteligente.
Las inversiones en extinción de incendios no reducen las causas del fuego ni controlan los incendios de quinta y sexta generación, que se encuentran fuera de la capacidad de extinción de los equipos técnicos. Los esfuerzos de las próximas décadas deben centrarse en la prevención de incendios y en la creación de paisajes resilientes, adaptados a los nuevos escenarios ambientales.
El herbivorismo pírico es una práctica para la gestión preventiva del riesgo basada en emular el régimen de perturbaciones en el que evolucionaron los ecosistemas naturales, en los que el fuego y el herbívoro controlaban el ciclo de la materia vegetal terrestre. La práctica, modernizada y fundamentada en sólidos conocimientos científicos, busca valorizar el papel ancestral del fuego y del herbívoro en el ciclo de la materia, y establecer las bases de la gestión de combustibles y de la restauración de ecosistemas, especialmente en áreas críticas y estratégicas para la prevención de incendios forestales.
COMPÁS promueve la investigación y la aplicación de nuevas tecnologías para la implementación del hervivorismo pírico, práctica que trata de emular el régimen de perturbaciones de los ecosistemas naturales, en el que el fuego y los herbívoros controlaban el ciclo de la materia vegetal terrestre.
Para ello, se prevé trabajar en diferentes zonas piloto donde se implementará una propuesta de prevención de incendios basada en la quema prescrita y la ganadería extensiva, realizando una propuesta de marco normativo y técnico de implementación de este modelo, con acciones de investigación y práctica de nuevos modelos de pastoreo y teledetección, así como acciones formativas y de diseño de nuevos modelos de negocio que permitan su viabilidad económica y social.
La implementación del modelo en experiencias piloto permitirá obtener información sobre las mejoras en la reducción de la carga de combustible y en la definición de planes plurianuales de pastoreo dirigido, lo que culminará con la firma de 6 contratos de participación para la implementación de prácticas de hervivorísmo pírico con fines medioambientales y de protección civil. Se espera asimismo contar con, al menos, 60 técnicos y 60 ganaderos y pastores formados en gestión de combustibles y creación de paisajes resilientes, así como, al menos, 90 personas acreditadas como formadoras en la materia y 8 convenios firmados con las administraciones responsables en materia de medio ambiente de cada territorio para la realización periódica de Cursos de Formadores de “Gestores de combustibilidad”.
Modelos de desarrollo regional sobre herbivorismo pírico, una herramienta para la conservación ambiental y la fijación y protección de la población (COMPÁS)
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