Según indica la entidad el cambio climático, se expone con dureza en nuestras latitudes. La alteración de los regímenes de lluvias se reflejará, según la Asociación Hombre y Territorio con especial relevancia en ecosistemas prioritarios como las lagunas temporales (Hábitat 3170) y su biodiversidad asociada, entre la que destacan anfibios y reptiles (sobre todo acuáticos), organismos susceptibles de sufrir al reducirse notablemente el hábitat disponible para desarrollar su vida. Estos organismos ofrecen servicios ecosistémicos, manteniendo el equilibrio ecológico en los cuerpos de agua en los que habita (evitando proliferación de mosquitos, por ejemplo, en el caso de los anfibios). Los espacios verdes de las ciudades son lugares estratégicos para adaptar y mitigar estos efectos, si se favorecen hábitats para soportar estos cambios y favorecer la conectividad.
El objetivo principal del proyecto ha sido fomentar herramientas para una mejora ambiental de espacios verdes urbanos con relación a anfibios y reptiles.
Entre los objetivos específicos destacan:
El proyecto “Herramientas de mejora de zonas verdes urbanas para herpetofauna amenazada por el cambio climático” ha contribuido a generar nuevos hábitats con el fin de propiciar la presencia de anfibios y reptiles en espacios verdes urbanos. Para ello se ha desarrollado en un espacio de acceso restringido situado en el Parque del Alamillo de Sevilla, considerado uno de los espacios verdes más relevantes de Andalucía.
En el marco del proyecto, se han creado 6 charcas nuevas y se ha recuperado otra ya existente. Tras la puesta en marcha de las charcas, se han generado hábitats y se ha facilitado el asentamiento de diferentes especies de fauna y flora, en una acción de restauración y regeneración coordinada.
También, se han inventariado las siguientes especies; rana común (Pelophylax perezi), sapillo pintojo ibérico (Discoglossus galganoi), ranita de San Antonio (Hyla arborea), gallipato (Pleurodeles waltl), culebra viperina o culebra de agua (Natrix maura), así como especies exóticas invasoras que se han retirado de las charcas, entre ellas; galápagos exóticos y peces del género Gambusia.
El proyecto ha contribuido a mitigar los efectos del cambio climático sobre los ecosistemas de agua dulce del que dependen numerosas especies de fauna silvestre, por ejemplo, anfibios y reptiles de hábitos acuáticos, ya que en la actualidad el régimen de precipitación estacional se ha alterado de forma patente en entornos de clima mediterráneo como la ciudad de Sevilla.
Por otro lado, se subraya de la iniciativa que los estanques temporales mediterráneos son considerados prioritarios entre los tipos de hábitat de interés comunitario (Hábitat 3170) y que todas las acciones encaminadas a su conservación y a la protección de las especies de fauna y flora que albergan contribuyen a luchar contra la pérdida de biodiversidad en un contexto de cambio climático.
Además, las actuaciones desarrolladas en el marco del proyecto contribuyen a la implantación de la Estrategia Nacional de Infraestructura Verde y de la Conectividad y Restauración Ecológicas, al favorecer la la instalación de puntos de agua temporales en entornos urbanos y zonas periurbanas que pueden ayudar a aumentar la conectividad funcional y estructural entre poblaciones de anfibios, reptiles y otras especies asociadas a ecosistemas de agua dulce, y facilitar, así, el incremento de la biodiversidad.
Herramientas de mejora de zonas verdes urbanas para herpetofauna amenazada por el cambio climático