Para mejorar la toma de decisiones y adaptación climática para la Denominación de Origen Calificada Rioja (DOCa Rioja), se ha realizado un estudio climático y sociológico.

La DOCa Rioja es una zona vitivinícola (63593 hectáreas y 315 millones litros vino), distribuida entre La Rioja, Álava y Navarra. Se beneficia de la confluencia de dos climas opuestos, atlántico y mediterráneo, que proporcionan temperaturas suaves y precipitaciones anuales algo superiores a 400 l/m², condiciones idóneas para el desarrollo de la vid. El escenario actual del cambio climático, con un incremento de la temperatura y una distribución más heterogénea de las precipitaciones es una amenaza potencial, alterando el desarrollo fenológico y madurativo o la incidencia de plagas y enfermedades, entre otros. Hasta ahora no se ha estudiado rigurosamente la evolución del clima en las últimas décadas en la DOCa Rioja, ni se ha evaluado la percepción del sector, ni el impacto técnico y socio-económico del cambio climático en vitivinicultura, así como de las posibles estrategias de adaptación y mitigación.

El presente proyecto finalizado ha abordado un estudio riguroso de la incidencia e impacto técnico y socio-económico del cambio climático en la producción vitivinícola de una de las zonas de mayor prestigio a nivel nacional e internacional, la Denominación de Origen Calificada Rioja (DOCa Rioja).

El proyecto ha estudiado la evolución del clima y fenología del cultivo de la vid en la Denominación de Origen Calificada Rioja (DOCa Rioja) durante el período 1950-2014, aportando datos a nivel espacial (66 mapas) y por municipio (12 tablas) de la evolución de 14 variables e índices climáticos. Asimismo, se ha realizado un diagnóstico sociológico de la percepción del cambio climático (CC) en el sector vitivinícola de la DOCa Rioja así como del conocimiento y puesta en marcha de prácticas de adaptación al mismo.

El estudio de la evolución del clima ha mostrado un incremento promedio de la temperatura media (0,9 – 1,2 ºC) en la mayor parte de la DOCa Rioja, lo que ha provocado un cambio en la clasificación climática del viñedo según el índice de Winkler hacia clases más cálidas. Ello se traduce en un adelanto generalizado de las fechas de brotación, floración y envero en Tempranillo y Garnacha.

El estudio sociológico reveló una alta preocupación por el cambio climático, un incremento en los costes de producción y una reflexión sobre las principales herramientas de adaptación, como el riego. Los resultados se presentaron en una jornada divulgativa y se recogieron en un informe técnico de referencia sobre el impacto del cambio climático en la DOCa Rioja entre 1950-2014, con el objetivo de servir de ayuda a la toma de decisiones en las políticas y prácticas de adaptación en las próximas décadas.