Con el apoyo de la Fundación Biodiversidad, del Ministerio para la Transición Ecológica, la UNEX (Universidad de Extremadura) ha desarrollado el proyecto “Manejo de la biodiversidad de la dehesa para aumentar su resiliencia frente al cambio climático”.
Los productos de la dehesa, el sistema silvopastoral más extenso de Europa, dependen en gran medida del agua de lluvia, tanto por el consumo directo del ganado como para la producción de pastos, bellotas y otros recursos. La reducción de las precipitaciones y el aumento de las temperaturas predichas para finales de siglo debido al cambio climático es una gran amenaza para su sostenibilidad.
El objetivo principal del proyecto consistió en concienciar sobre la necesidad de mejorar la sostenibilidad de la dehesa frente al cambio climático. Para ello se ha creado una red de dehesas demostrativas de participación y desarrollo donde se están llevando a cabo prácticas que mejoran la capacidad de adaptación de la dehesa frente al cambio climático. La red sirve como punto de referencia para que otros ganaderos y gestores empiecen a aplicar estas prácticas de manejo.
En total la red la forman en torno a 25 fincas públicas y privadas repartidas por todo el territorio nacional. Todas las dehesas de la red están llevando a cabo alguna mejora en el aprovechamiento de los recursos con el fin de mejorar su sostenibilidad a largo plazo. Las acciones que están llevando a cabo son la mejora de pastos, el uso de bancos forrajeros, el aprovechamiento de restos de podas y la implementación de diseño en línea clave (keyline) para mejorar la captación de agua de lluvia.
El proyecto también ha incluido acciones de comunicación y divulgación. Para ello se han realizado cinco visitas a dehesas de la red donde más de 150 participantes de distintos perfiles han visto cómo mejorar la adaptación de la dehesa al cambio climático. El proyecto concluyó con la celebración del I encuentro de la red de dehesas amigas del clima.