Considerando que el origen de los residuos marinos es fundamentalmente el plástico, el vidrio o la madera, el papel de la ciudadanía en este sentido es clave a la hora de hacer frente a este problema disminuyendo la cantidad de residuos que llegan a nuestras playas y costas. En nuestro país, proyectos para la conservación del entorno marino como el convenio OSPAR, o la iniciativa de MARNOBA atienden este problema, habiendo instaurado protocolos de actuación que prevén la disminución de la amenaza para la vida marina a través de varios mecanismos. Sin embargo, este objetivo no sería alcanzable, sin la implicación de la ciudadanía.
En este contexto, Cruz Roja Española (CRE), pone en marcha el proyecto «Participación y voluntariado ambiental en costas» con el que establece alianzas con las administraciones y con su red de voluntariado para la recogida de datos e identificación de las basuras marinas, ha realizado labores de limpieza y concienciación con todos los sectores implicados en las costas.
El proyecto ha permitido la sensibilización del público general sobre las principales amenazas que tiene la biodiversidad y ecosistemas costeros, mediante la realización de un amplio número de campañas de formación de voluntariado, vigilancia y recogida de residuos y sensibilización de todos los usuarios de las costas. Se han formado un total de 589 voluntarios, realizándose 2.013 actividades voluntarias, con un total de 3.177 personas participantes.