La entidad enuncia que, a lo largo de la historia, los ríos han sido utilizados como fuente de energía y de vida, medio de transporte, vertedero, etc., lo cual ha supuesto, en mayor o menor medida, la degradación de sus aguas y sus márgenes, así como de la flora y la fauna que los habita. Por ello, continúa la entidad, los ecosistemas de agua dulce, son uno de los entornos naturales más degradados de nuestro país, siendo su prioridad su conservación y mejora. El estudio de estos ecosistemas fluviales y la determinación de su estado de conservación, junto a las correspondientes labores de restauración y mejora in situ de estos ecosistemas amenazados, será el eje vertebrador del programa de voluntariado en ríos, propuesto por la Cabaña Real de Carreteros y basado en la participación la ciudadanía, que pretende mejorar de un modo directo el estado de los ríos de las Cuencas del Duero y del Ebro.
El principal objetivo persigue conservar el paisaje ripario, restaurar enclaves, mejorar la conectividad ecológica y educar sobre la gran importancia de los hábitats ligados al agua dulce, a través del impulso y promoción del voluntariado ambiental y de la participación ciudadana, como la mejor herramienta de protección y puesta en valor de nuestros ríos, riberas y zonas húmedas, principalmente de 30 localidades de las cuencas del Duero y Ebro:
Los objetivos específicos son los siguientes:
– 112 actividades en 40 municipios/localidades.
– 31 tramos de ríos mejorados gracias a la participación ciudadana.
– 31 charlas, conciertos, talleres o rutas.
Voluntariado en ríos y en las reservas naturales fluviales de Castilla y León, La Rioja, País Vasco, Asturias y Cantabria