El proyecto, cuya base ha sido el Modelo de Planificación Fluvial elaborado por el Ayuntamiento de Pamplona en los últimos años, sienta las bases de una ciudad resiliente y comprometida con el medio natural.
Pamplona a través de su AGENDA URBANA 2030, en cuyo marco se integra este proyecto, ha apostado por las infraestructuras verdes y azules como herramienta para lograr una ciudad más ecológica, comprometida con la lucha frente el cambio climático, con una movilidad más sostenible. Una Pamplona donde la igualdad, la participación, la convivencia, la inclusión, la ecología, la accesibilidad universal y la perspectiva de edad y género sean valores fundamentales.
Su objetivo es completar una red de infraestructuras verdes y azules de la ciudad, tomando nuestros ríos como ejes vertebradores generales, con visión de futuro a corto, medio y largo plazo, con medidas de planificación que conecten unas con otras con coherencia urbana y ecológica en sus tiempos y formas de ejecución.
Implica la integración de los entornos fluviales en la ciudad manteniendo y
potenciando sus valores naturales y urbanos, corrigiendo los impactos existentes y mejorando su funcionamiento hidráulico, para sentar las bases de una ciudad resiliente comprometida con el medio natural.
Entre las acciones que se plantea este proyecto destacan:
Renaturalización urbana de Pamplona 2025 (RUNA 2025)