Según la Universidad de León, es probable que el aislamiento sea más importante que los factores locales en el funcionamiento de las zonas húmedas mediterráneas. Si esto es así, afirma, la gestión de humedales deberá tender a la protección de redes de hábitats conectados y no de espacios singulares como es habitual.
Por ello, es necesario desarrollar métodos que permitan evaluar la conectividad entre espacios para determinar la importancia de las dinámicas metapoblacionales y metacomunitarias y establecer redes de humedales.
De esta forma se podrá decidir cuándo priorizar la conectividad o cuándo reducir los impactos locales en las medidas de gestión de espacios. Los métodos moleculares pueden, además, permitir conocer la presencia y abundancia de especies de interés y podrían ser métodos rutinarios de gestión. Los anfibios son el grupo ideal para evaluar estos aspectos por su diferente capacidad dispersiva y por su vulnerabilidad frente al cambio climático y la globalización.
Este proyecto tiene como objetivo general desarrollar herramientas moleculares que permitan evaluar la conectividad entre humedales, evidenciar la existencia de dinámicas metapoblacionales y metacomunitarias y la presencia y abundancia de especies de interés. Además, estudia la importancia de las zonas húmedas protegidas como fuentes o sumideros de propágulos.
Cuenta con estos objetivos específicos:
Aplicación de herramientas moleculares para la gestión de humedales y especies acuáticas vulnerables al cambio climático y la globalización