Los polinizadores juegan un papel esencial en el funcionamiento de los ecosistemas y son vitales para el sector primario agrícola. Se ha detectado un claro declive en muchas de las especies, con causa multifactorial en el que la pérdida de hábitat de alimentación y reproducción tiene un rol fundamental.
En respuesta a esta situación, España ha elaborado el Plan de Acción Nacional para la Conservación de los Polinizadores (aprobado en septiembre de 2020) que aborda diferentes áreas de actuación entre las que destaca la promoción de su hábitat de nidificación, alimentación y cobijo, así como la realización de investigaciones acerca de las aportaciones o efectos directos de la producción ecológica sobre las poblaciones de polinizadores.
Esta iniciativa realiza diferentes actuaciones que encajan con estas áreas temáticas, e incluye además el estudio del efecto de este declive en los consumidores secundarios.
El objetivo principal es promover el incremento de las poblaciones de polinizadores y otros invertebrados.
Entre sus metas concretas destacan:
Restauración de hábitat para polinizadores y estudio del efecto de su declive en consumidores secundarios (Operación Polinizadores)