Desarrollar la infraestructura verde de Viladecans y mejorar la conectividad con el entorno natural que lo rodea (Sierra del Montbaig, Parque Agrario, Delta del Llobregat), de forma que se mejore la integración entre la naturaleza y la ciudad, se aumente la resiliencia del municipio frente al cambio climático y se produzca una mejora en la salud y el bienestar de sus habitantes, contribuyendo al logro de la norma 3-30-300. Todo ello bajo las bases de una gobernanza colaborativa e igualitaria.
Viladecans es un municipio situado en el Área Metropolitana de Barcelona con 66.707 habitantes. Se encuentra rodeado de naturaleza de un alto valor ecológico y paisajístico (la Sierra de Miramar al norte, el Delta del Llobregat al este y el Parque Agrario del Baix Llobregat al sur). Sin embargo, el crecimiento de la ciudad no ha respetado su entorno natural, suponiendo una barrera gris para la conectividad ecológica. El 79% de la infraestructura del núcleo urbano es gris y la cobertura arbórea apenas cubre el 9%. Ante esta situación, el municipio ha comenzado a trabajar en la renaturalización de los espacios verdes (diagnóstico de naturalización de Viladecans). Con PLAN VILADECANS 3-30-300 se impulsará la transformación de la ciudad en base al desarrollo de su infraestructura verde, mejorando la conectividad con los espacios naturales y el incremento y conservación de la biodiversidad. Así se mejorará la habitabilidad de la ciudad y calidad de vida para sus habitantes
El objetivo es transformar la ciudad en base al desarrollo de su infraestructura verde, mejorando la conectividad con los espacios naturales y el incremento y conservación de la biodiversidad. Así se mejorará la habitabilidad de la ciudad y la calidad de vida de sus habitantes.
Con PLAN VILADECANS 3-30-300 se desarrollará una de las líneas estratégicas del Plan Sectorial de Naturalización, el Programa 3-30-300. Este recogerá las acciones que darán respuesta a las necesidades identificadas en el diagnóstico del PSN en base a la norma 3-30-300. El objetivo 3 de esta norma, cada persona debe poder ver al menos 3 árboles desde su casa, se abordará, por un lado, con la plantación de 635 árboles en el Torrente de Can Preses, y, por el otro, con la plantación de 9.106 árboles y arbustos en 12 zonas de interior (parques y áreas verdes) y en los laterales de la autopista C-32. Estas plantaciones actuarán como refugios climáticos y como sumideros de CO2, siendo capaces de captar, al menos, 139,9 toneladas a lo largo del proyecto, además de ofrecer otros beneficios ambientales, como la mejora de la calidad del aire, el paisaje urbano y la reducción del impacto acústico.
Respecto al 30 de la norma, disponer de un 30% de masa arbórea en el municipio, tanto la intervención en el Torrente de Can Preses como la creación de un bosque urbano junto a la autopista C-32, como el refuerzo de la cobertura vegetal en parques y jardines, contribuirán a este objetivo, incrementando la cobertura verde de la zona hasta un 30% cuando los árboles alcancen su crecimiento óptimo.
En cuanto al objetivo 300, que el vecindario cuente con un espacio verde de calidad a menos de 300 metros de cada hogar, la rehabilitación del Torrente contribuirá a su logro con la naturalización del entorno, y la redefinición de usos, que reducirá las superficies pavimentadas, aumentará la permeabilidad del suelo y permitirá crear carriles ciclables que conecten Viladecans con municipios vecinos, poniendo al alcance de los barrios Can Palmer-Can Batllori una zona verde de calidad. Además, estas medidas irán acompañadas por actuaciones para favorecer la fauna urbana. Por ejemplo, se instalarán de 150 cajas nido para aves y 30 cajas nido para murciélagos, además de instalar refugios para invertebrados.
Renaturalización del núcleo urbano de Viladecans, a través del cumplimiento de los objetivos 3-30-300, para mejorar la conectividad y la biodiversidad de la infraestructura verde y la salud urbana. (PLAN VILADECANS 3-30-300)
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